Un año nuevo significa empezar de nuevo. Si usted es una de las muchas personas que se hace una lista anual de propósitos de Año Nuevo, sabe lo difícil que puede ser cumplirlos. Tal vez te propusiste hacer más ejercicio, pero el trabajo o tu vida personal te pillaron a contrapié. Suele ocurrir, y no pasa nada. Recuerda que el progreso y el esfuerzo siguen siendo pasos valiosos para alcanzar tus objetivos.
Muchas personas también se proponen mejorar su salud financiera. De hecho, según una encuesta reciente, el 66% de los estadounidenses se propusieron mejorar su situación financiera en Año Nuevo. La encuesta también reveló que más de la mitad (53%) de los encuestados se había marcado como objetivo el pago de sus deudas. Dependiendo de la cantidad de deuda que tenga, saldarla puede llevarle más de un año. Sin embargo, se trata de un gran objetivo a largo plazo, y es fundamental progresar cada año.
Propósitos financieros de Año Nuevo
Hay varios objetivos relacionados con el dinero que la gente se fija al entrar en el nuevo año, y todos ellos pueden alcanzarse con disciplina financiera y un poco de trabajo duro.
Pago de la deuda
Como ya se ha mencionado, saldar deudas es uno de los objetivos financieros más comunes para el nuevo año. Tal vez empiece el año luchando con deudas de tarjetas de crédito, préstamos personales odeudas médicas. Aunque las deudas pueden ser un gran obstáculo, es posible superarlas.
Empieza por crear un presupuesto, si aún no lo has hecho. Gestionar tus gastos con cuidado puede ayudarte a tener más dinero en el bolsillo, que luego podrás utilizar para pagar tus deudas.
Determina qué gastos puedes recortar y decide cómo se repartirá tu dinero. Mucha gente sigue la regla presupuestaria 50/30/20, según la cual el 50% de los ingresos se reserva para necesidades, el 30% para deseos y el 20% para ahorros.
No existe una solución única para todos los presupuestos, ya que las circunstancias financieras de cada persona son únicas. Por ejemplo, es posible que una parte de la categoría "deseos" pueda utilizarse para pagar deudas. Tenga en cuenta que los propósitos de Año Nuevo a menudo implican hacer sacrificios, que acabarán compensándose a largo plazo.
Si tiene deudas no garantizadas, considere la posibilidad de inscribirse en un programa de reducción de deudas. Empiece por investigar diferentes empresas y encontrar la que mejor pueda ayudarle con su situación financiera. Si reúne los requisitos necesarios, los especialistas en deudas negociarán en su nombre con los emisores de tarjetas de crédito y los prestamistas; existe la posibilidad de que sólo pague una parte de lo que debe. Dependiendo del programa y del importe de su deuda, podría quedar libre de deudas en tan sólo 24-48 meses.
Aumentar sus ahorros
¿Será éste el año en que haga la compra de sus sueños? Tal vez su propósito de Año Nuevo sea comprar o ahorrar para una casa, un coche o incluso unas vacaciones muy necesarias.
Es posible que también quieras constituir un fondo de ahorro para emergencias. La pandemia de COVID-19 demostró que es mejor estar preparado para imprevistos como una enfermedad o la pérdida del empleo. Según un reciente informe de Plinqit, el 32% de los estadounidenses ahorra para un fondo de emergencia a largo plazo y el 28% ahorra para un fondo de emergencia a corto plazo. Si aún no tienes un fondo de emergencia, es muy recomendable crearlo y contribuir a él con regularidad o tan a menudo como sea posible.
Una vez más, el presupuesto es la clave. Empieza por determinar qué gastos puedes eliminar o reducir. Por ejemplo, puedes cancelar las suscripciones que no utilices o prepararte el café en casa en lugar de pasar por la cafetería de la esquina todas las mañanas. Si dedicas parte de tus ingresos mensuales a "cosas que quieres", comprueba si hay alguna parte que puedas destinar a tus ahorros.
Por último, considera la posibilidad de buscar un compañero de piso o reducir el tamaño de la vivienda para ahorrar en gastos de manutención. Si puedes vivir sin pagar alquiler con tu familia, aprovecha la oportunidad y ahorra más dinero del que tanto te ha costado ganar. Y recuerda: no tiene por qué ser una solución permanente. Ajustar temporalmente tu situación vital puede ayudarte a ahorrar para tener más comodidad y espacio personal en el futuro.
Aumentar sus ingresos
Tener más de un ingreso es una buena manera de ayudar a pagar las deudas o aumentar los ahorros.
Considera la posibilidad de encontrar un trabajo a tiempo parcial con requisitos que se ajusten a tus habilidades y experiencia. La mayoría tienen horarios flexibles y algunos incluso te permiten trabajar desde casa.
Si eres un experto en redes sociales, busca un trabajo de gestor de redes sociales en una plataforma de autónomos como Upwork o Fiverr. Los conductores con experiencia y buenos conocimientos de navegación pueden trabajar en servicios de transporte compartido como Uber o Lyft. Si te sientes más cómodo conduciendo solo, considera la posibilidad de repartir comida a través de aplicaciones como DoorDash o Uber.
Cualquier afición, como la pintura o la fotografía, también puede convertirse en un negocio paralelo. Por ejemplo, puedes vender tus obras de arte por Internet y fijar tus propios precios.
Aunque tener un trabajo secundario puede ser muy beneficioso para aumentar tus ingresos, no siempre es necesario. Si tienes ropa poco usada u otros artículos en buen estado por casa, puedes venderlos en Internet. Sitios como Facebook Marketplace, eBay, Mercari, Bonanza o Poshmark te permiten fijar los precios de los artículos que pones a la venta. Puede que tengas que pagar una pequeña cuota por el uso del sitio.
Mejorar sus conocimientos financieros
Si le cuesta entender conceptos financieros, no está solo. Una encuesta reciente muestra que sólo el 57% de los adultos estadounidenses tienen formación financiera. La falta de conocimientos financieros puede impedirle alcanzar sus objetivos financieros personales, como saldar deudas o acumular riqueza.
Afortunadamente, existe una amplia variedad de recursos sobre finanzas personales para ayudarte a empezar. Libros, podcasts y series de vídeos son herramientas educativas accesibles que pueden explicar los principios básicos de las finanzas a los principiantes. Suelen tratar temas como la gestión de tarjetas de crédito, el pago de deudas, presupuestos, inversiones, puntuaciones de crédito, impuestos y planificación financiera, entre muchos otros. Recuerda que nunca es demasiado tarde ni demasiado pronto para empezar a aprender sobre finanzas personales.
Manténgase en el buen camino
No hace falta ser un mago de las finanzas personales para cumplir tus propósitos financieros de Año Nuevo. Con autodisciplina y trabajo duro, puedes mejorar tu salud financiera no sólo para este año, sino también para el futuro.