Ahora que acaba 2020 (¡menos mal!), quizá debería pensar en hacer de 2021 el año en que empiece a ahorrar dinero. Incluso en tiempos de bonanza, a la gente le cuesta encajar el ahorro en su presupuesto general. De hecho, la Reserva Federal indica que la tasa de ahorro personal de los consumidores era sólo del 12,9% en noviembre de 2020. Por lo tanto, si usted es una de las personas a las que les ha resultado difícil ahorrar dinero recientemente, un nuevo año ofrece nuevas oportunidades para cambiar hábitos, añadir un poco de disciplina personal y empezar a acumular más ahorros cada mes. Una de las decisiones clave que tendrá que tomar es el tipo de cuenta (o cuentas) que utilizará para acumular ahorros y alcanzar sus objetivos financieros. Eche un vistazo a los distintos tipos de cuentas disponibles, para encontrar un buen plan de ahorro que se ajuste a sus necesidades.
Cuenta de ahorro estándar o tradicional
La mayoría de los bancos tradicionales y online ofrecen algún tipo de cuenta de ahorro estándar que devenga intereses. Es probable que usted tenga una de estas cuentas, o quizá la tuvo en algún momento de su vida en el que ahorrar dinero era importante. Este tipo de cuentas son útiles, sobre todo si tiene una en el mismo banco donde tiene una cuenta corriente; cuando tenga que pagar una factura para la que ha estado ahorrando, como los impuestos de su propiedad, puede simplemente pasar dinero de su cuenta de ahorro a su cuenta corriente y hacerse cargo de ella. Sin embargo, la mayoría de las cuentas de ahorro ordinarias devengan tipos de interés muy bajos y muchas de ellas también cobran comisiones a los usuarios. Por lo tanto, si no piensa utilizar el dinero que ha ahorrado durante un tiempo, es probable que no gane ningún valor real mientras esté aparcado en una cuenta de ahorro normal.
Cuentas de ahorro de alta rentabilidad
En las dos últimas décadas ha habido una explosión de bancos online. Aunque la mayoría no tienen sucursales físicas, funcionan exactamente igual que los bancos normales de la calle principal de su comunidad. Como estos bancos suelen tener costes de funcionamiento mucho más bajos que sus homólogos físicos, a menudo ofrecen cuentas de ahorro de mayor rentabilidad. Estas cuentas de ahorro ofrecen tipos de interés considerablemente más altos que las cuentas normales y son igual de fáciles de abrir y mantener. Sin embargo, como la mayoría de los bancos que ofrecen estas cuentas están en línea, una cuenta de ahorro de alto rendimiento puede ser un inconveniente si desea tratar con un banco estándar situado en su comunidad.
Cuentas del mercado monetario
Una cuenta del mercado monetario es una especie de híbrido entre las cuentas corrientes y las de ahorro. La mayoría de estas cuentas permiten a los usuarios librar un número limitado de cheques contra la cuenta cada mes y pueden llevar asociada una tarjeta de débito para facilitar los pagos y las retiradas. Las cuentas del mercado monetario suelen ofrecer también tipos de interés elevados, otra ventaja. Sin embargo, la mayoría de estas cuentas exigen saldos mínimos más elevados que otros tipos de cuentas de ahorro. Además, aunque la función de cheques de estas cuentas puede ser cómoda para acceder a sus ahorros, puede que no necesite o no quiera la tentación de acceder fácilmente a sus ahorros si está tratando de reservar ese dinero hasta que lo necesite para una compra importante en su vida.
Certificados de depósito
Un certificado de depósito, o CD, es una cuenta de ahorro que ofrece un alto tipo de interés a cambio de no retirar dinero de la cuenta durante un largo periodo. Los CD se definen normalmente por el tiempo que exigen a los usuarios mantener el dinero depositado en la cuenta y oscilan entre tres meses y cinco años. Cuanto más largo sea el periodo, mayor será el tipo de rendimiento del CD. En la mayoría de los casos, puede obtener un interés más alto por sus ahorros en un CD que en cualquiera de las otras cuentas descritas aquí. Sin embargo, la mayoría de los CD requieren que los usuarios comiencen con un depósito mínimo mayor, y es probable que pague una penalización si retira sus fondos antes de tiempo. Por último, aunque los tipos de interés de los certificados de depósito son más elevados que los de otras cuentas de ahorro, puede tener sentido que los usuarios consideren otras inversiones de bajo riesgo que potencialmente pueden reportar mayores rendimientos con el tiempo que tener ese dinero parado en un CD durante años.
Cuentas de ahorro especializadas
Los bancos y otras entidades financieras suelen ofrecer cuentas de ahorro para fines específicos. Entre ellas están las cuentas de ahorro de custodia para los hijos, las cuentas de ahorro para la educación universitaria y distintos tipos de cuentas de jubilación, como las cuentas IRA tradicionales o Roth. Todas estas cuentas tienen finalidades distintas; las cuentas IRA, por ejemplo, le permiten prepararse para la jubilación, mientras que las cuentas de custodia le permiten ahorrar dinero para sus hijos hasta que tengan edad suficiente para tomar sus propias decisiones sobre cómo utilizarlo. Sin embargo, algunas de estas cuentas tienen normas específicas sobre las retiradas de fondos, y las ventajas de cada una de ellas pueden variar en función de su situación fiscal personal. Antes de abrir una de estas cuentas, hable con un contable o planificador financiero de confianza.
Un buen plan de ahorro suele requerir varias cuentas de ahorro
Cuando empiece a prepararse para ahorrar más dinero en 2021, debe tener en cuenta que puede necesitar diferentes cuentas de ahorro para diferentes compras. Por ejemplo, tal vez le convenga tener una cuenta de ahorro estándar o de alto rendimiento en la misma entidad en la que tiene su cuenta corriente, de modo que pueda transferir dinero de los ahorros para pagar grandes facturas anuales, como los impuestos sobre la propiedad. Además, puede que también quiera tener una cuenta de jubilación para prepararse para su segundo acto. Si tienes hijos, también puedes abrirles una cuenta de ahorro infantil, para que puedan ahorrar todos esos cheques de cumpleaños hasta que tengan edad suficiente para utilizar el dinero. Así pues, determine cuáles son sus objetivos de ahorro para el nuevo año y abra las cuentas que necesite para alcanzarlos.