Todos tendemos a gastar de más de vez en cuando, y suele ocurrir cuando compramos algo impulsivamente. Aunque derrochar en algo inesperado de vez en cuando probablemente no suponga un gran problema financiero, hacerlo con regularidad podría ponerle en un aprieto económico. Es especialmente importante que piense bien sus compras cuando adquiera artículos caros, ya que una compra impulsiva de algo caro podría perjudicarle financieramente. Además, parte del éxito de toda situación financiera es la capacidad de controlar el gasto y de ceñirse a determinados objetivos a largo plazo. Entonces, ¿qué estrategias podemos utilizar para mantener nuestros gastos bajo control y construir nuestro futuro financiero? Veamos algunos consejos sencillos.
Consejo nº 1: Lleve sólo dinero en efectivo
Cuando llevas dinero en efectivo y lo gastas, tienes que ver cómo el dinero sale de tus manos. Es una experiencia de compra completamente distinta a la de utilizar una tarjeta de crédito. Ver cómo te gastas el dinero te ayudará sin duda a frenar esas compras impulsivas, sobre todo si piensas en lo mucho que has tenido que trabajar para conseguir ese dinero. Además, si estás haciendo un presupuesto y sólo tienes una cierta cantidad de dinero para la semana, será más difícil que gastes tu dinero tontamente. Prueba a llevar sólo dinero en efectivo (tampoco mucho en cada momento) y verás cómo disminuyen tus gastos. Incluso gastar unos cuantos dólares en un café gourmet te hará reflexionar.
Consejo nº 2: No lleve tarjetas de crédito en la cartera
No llevar tarjetas de crédito en la cartera evitará en gran medida las compras impulsivas y los gastos excesivos. Es fácil justificar la compra cuando puedes cargarla a una tarjeta de crédito y preocuparte después. Puedes evitarlo dejando las tarjetas en casa y utilizándolas sólo en caso de emergencia, o mejor, no utilizándolas en absoluto. Las tarjetas de crédito son mejor como última línea de defensa para gastos de emergencia.
Consejo nº 3: Presupueste su dinero
Cuando te tomas el tiempo necesario para elaborar un presupuesto y tomar decisiones inteligentes sobre cómo gastar tu dinero, te resultará difícil desviarte de ese plan una vez que te hayas esforzado. El mero hecho de ser consciente de en qué gasta su dinero puede ayudarle mucho a mantener el control de lo que gasta. Al designar un propósito para cada dólar que ganes, tendrás que tomar decisiones conscientes para tomar dinero de un área específica para financiar tu compra impulsiva. Ceñirse a un presupuesto es la mejor manera de evitar gastar más de la cuenta y hacer compras impulsivas que pueden poner en peligro tu estabilidad financiera.
Consejo nº 4: Formule un plan financiero a largo plazo
Cuando defines tus objetivos financieros y desarrollas un plan a largo plazo sobre cómo quieres construir tu futuro financiero, te saca del momento y te hace mirar hacia adelante en tu vida. Mantenerte fuera del momento de compra y centrado en el largo plazo te ayudará a mantener tus compras en perspectiva y a mantener los pies en la tierra. Quizá su plan a largo plazo consista en ahorrar para comprar su primera casa o empezar a financiar su jubilación anticipadamente. Si tiene un plan en mente y comprende lo que le costará alcanzar sus objetivos financieros, estará más capacitado para tomar buenas decisiones de compra y gastar su dinero con sensatez.
Consejo nº 5: No compre con otros
Aunque pueda parecer un consejo muy antisocial, en realidad es una forma estupenda de evitar las compras destructivas e impulsivas. La presión del grupo puede contribuir a menudo a gastar más de la cuenta. A nadie le gusta parecer tacaño, y a todo el mundo le gusta fingir que el dinero no importa. Sucumbir a una compra impulsiva por la presión de grupo significa gastar dinero que no tienes y ponerte en una situación difícil. Esto es especialmente cierto si vas de compras con un amigo que tiene más dinero para gastar que tú, o que también tiene un problema de gastos. No dejes que nadie te presione o te avergüence para que gastes más dinero del que puedes permitirte, ya que pagarás el precio económico mucho después de que la emoción de la compra haya desaparecido.
Consejo nº 6: No compre para mejorar su estado de ánimo
No utilices las compras para sentirte mejor. Aunque comprar algo te haga feliz, la sensación será efímera y temporal. Gastar dinero para apaciguar tu mal humor es una mala manera de afrontar tus sentimientos, y podría conducir a problemas de gasto a largo plazo. Estos problemas pueden llevar a dificultades financieras e incluso a la ruina económica si este comportamiento se descontrola. Encuentra formas productivas de afrontar tus sentimientos y aprende mejores maneras de lidiar con el estrés.
Consejo nº 7: Conozca sus limitaciones
Todo el mundo tiene puntos débiles. Ya se trate de ropa, decoración del hogar o alimentos, aprenda a evitar las situaciones en las que pueda sentirse tentado a gastar más de la cuenta. Ejercer la autodisciplina es como flexionar un músculo: cada vez resulta más fácil. Mantente alejado de tiendas y establecimientos de comida que puedan tentarte a gastar más dinero del que deberías. Aunque te sientas bien mientras compras o comes allí, el arrepentimiento no tardará en aparecer cuando salgas para volver a casa.
Consejo nº 8: Planifique cuándo va a comprar
Cuando te dispongas a comprar lo que realmente necesitas, haz una lista y comprométete a cumplirla. Cuando se trata de dinero, nunca es bueno dejarse llevar por la precaución e improvisar. La mayoría de los consumidores gastan mucho más dinero del que deberían simplemente porque no planifican sus compras. Tener un plan también te ayuda a encontrar las mejores ofertas y a tomar mejores decisiones de compra, sobre todo cuando se trata de artículos caros.
Consejo nº 9: Ponga por escrito sus objetivos financieros
Escribir tus objetivos puede ayudarte a hacerlos reales y tangibles. También sirve como recordatorio de lo que quieres conseguir. Escríbelos en una tarjeta pequeña y guárdalos en la cartera. Allí te recordarán constantemente que debes ceñirte a tus objetivos y no gastar de más ni hacer compras impulsivas. Cumplir tus objetivos es imprescindible cuando planificas tu jubilación o ahorras para la educación de tus hijos. No dejes que los gastos impulsivos te impidan conseguir las cosas más importantes de la vida.
Consejo nº 10: Elimine las tentaciones
No hay razón para permitir que las tentaciones se cuelen en tu vida y te despisten. Deje de recibir correos electrónicos de los lugares donde le gusta ir de compras que anuncian constantemente rebajas y descuentos tentadores. Pídeles que dejen de enviarte catálogos y folletos.
Consejo nº 11: Retrase sus compras
Cuando veas algo que crees que realmente necesitas, sobre todo si es un artículo caro, no lo compres de inmediato. Espera una semana más o menos. Muchas veces, la necesidad se desvanecerá con el tiempo y te darás cuenta de que realmente no lo necesitas o de que no necesitas gastar tanto dinero como pensabas. Retrasar tus compras te permitirá reevaluar tus necesidades para asegurarte de que estás tomando buenas decisiones. También te dará tiempo para comparar precios y asegurarte de que consigues la mejor oferta.
Consejo nº 12: Aléjese de los lugares que le incitan a gastar
Si te pones en situación de gastar dinero, lo más probable es que lo hagas. No te limites a ir al centro comercial y deambular sin ningún plan en mente. Esta misma regla es válida para tus tiendas y boutiques favoritas. No se limite a entrar para ver qué hay de nuevo o para visitar al dependiente. Si lo hace, caerá en la tentación de comprar cosas que no necesita. Cuando tengas que hacer una compra, cógela y vete; no la utilices como excusa para mirar a tu alrededor y ver qué más te tienta comprar.
Consejo nº 13: Manténgase alejado de los sitios de compras por Internet
Muchas personas pasan el tiempo en Internet "mirando escaparates" de lo que les gusta. Esto está bien, siempre que no se realicen todas las compras. Sitios como Amazon facilitan demasiado la compra de artículos con una tarjeta de crédito registrada. Basta con un par de clics para gastar el dinero. Comprar por Internet es alejarse aún más del gasto en efectivo, ya que ni siquiera es necesario entregar la tarjeta de crédito. Muchas personas se han creado dificultades financieras por gastar más de la cuenta en Internet.
Consejo nº 14: Controle sus ganas de gastar
A veces, ni siquiera nos damos cuenta de la frecuencia con la que nos entran ganas de gastar dinero innecesariamente. Esto puede dificultar el cambio de comportamiento si tiene un problema de gastos. Intenta llevar un registro de tus impulsos de gastar, en un esfuerzo por ser más consciente de ti mismo. Utilice un sistema de recuento o lleve una lista en el teléfono. Cuando sientas el impulso de gastar, anótalo y sustitúyelo por algo productivo, como leer un capítulo de un libro de superación personal o incluso enviar un mensaje de texto o un correo electrónico a un amigo o a un ser querido. Si estás comprando en Internet, levántate y da un paseo, tómate algo o empieza otra tarea. Sustituyendo esos impulsos por otras cosas, puedes empezar a alterar tu comportamiento para alejarte del gasto impulsivo y conseguir controlar los impulsos destructivos.
Consejo nº 15: haga cuentas
A veces, poner la compra en términos de dinero real puede ayudar a mantener el gasto en perspectiva. La próxima vez que te enfrentes a la idea de gastar dinero, sobre todo en un artículo que tenga un coste elevado, calcula el número de horas que tendrás que trabajar para pagarlo. No lo olvides: las horas que pasamos trabajando son horas a las que renunciamos a estar con la familia y a realizar actividades de ocio que realmente nos gustan. Pregúntate si estás dispuesto a hacer ese sacrificio sólo para tener el artículo material que estás considerando.
Consejo nº 16: Ponga sus tarjetas de crédito en hielo
Si suele gastar demasiado dinero con sus tarjetas de crédito, pero no se siente cómodo renunciando a ellas por completo, considere la posibilidad de congelarlas. Aunque puedes conectarte a Internet con la mayoría de las tarjetas de crédito y congelarlas, hay una forma aún mejor de evitar que las utilices impulsivamente. Mete la tarjeta en una bolsa con cremallera y agua y congélala en tu congelador. Así tendrás que esperar a que se descongele para utilizarla. A veces, el mero hecho de tener que esperar unas horas hará que se te pase el impulso.
Consejo nº 17: Mantenga una conversación consigo mismo
Antes de gastar dinero en una gran compra o de hacer una compra impulsiva, hágase algunas preguntas importantes. ¿Por qué es tan importante para ti comprar este artículo? ¿Estás utilizando esta compra para calmar un sentimiento, como la depresión o la inadecuación? ¿Le va a mejorar la vida tener este artículo? Plantearse y responder estas preguntas le ayudará a mantener la perspectiva de las compras y a evitar los remordimientos del comprador en el futuro.
Desarrollar algunas buenas estrategias y habilidades para evitar gastar más de la cuenta y malgastar el dinero en compras impulsivas te ayudará a alcanzar tus objetivos financieros más rápida y fácilmente. También te mantendrá alejado de los problemas de endeudamiento. Utiliza estos sencillos métodos para mantenerte en el buen camino y hacer el mejor uso posible del dinero que tanto te ha costado ganar.