Pocas personas disfrutan haciendo presupuestos. De hecho, alrededor del 60% de la gente ni siquiera tiene un presupuesto doméstico de ningún tipo. Desafortunadamente, si no crea algún tipo de presupuesto que le ayude a asignar sus recursos financieros, puede ser muy difícil lograr cosas importantes, como ahorrar e invertir o pagar sus tarjetas de crédito para liberarse de las deudas. Afortunadamente, no tienes que aprender a amar los presupuestos para controlar tus finanzas personales. En su lugar, puede aplicar algunas prácticas sencillas de gestión del dinero para sacar el máximo partido a su dinero duramente ganado. Estos son cinco consejos para quienes odian hacer presupuestos.
1. Aprovechar las aplicaciones y los pagos automatizados
Si los aspectos tediosos y lentos de la elaboración de presupuestos le desaniman, no se preocupe. Puedes utilizar la tecnología a tu favor y limitar toda esa monotonía presupuestaria. Existen docenas de fantásticas aplicaciones que facilitan más que nunca el seguimiento de tu dinero, la realización de pagos y la observación de dónde y cómo ahorras y gastas dinero. Aplicaciones como Mint, por ejemplo, pueden ayudarte a mantener toda tu información financiera tan cerca como tu smartphone u otro dispositivo móvil. Además, establecer pagos automáticos puede ayudar a garantizar que sigues unos principios presupuestarios sólidos mes tras mes, incluso si no estás estudiando minuciosamente una hoja de cálculo para controlar a dónde va cada céntimo. Por ejemplo, si te aseguras de que se transfiere una cantidad de dinero a una cuenta de ahorro o de inversión cada vez que cobras, te asegurarás de cumplir tus objetivos de ahorro a largo plazo, aunque no utilices un presupuesto tradicional para controlar tus objetivos.
2. Configurar varias cuentas
También puede facilitar la consecución de objetivos financieros importantes a largo plazo creando cuentas diferentes para cada uno de ellos. Tener una cuenta bancaria o de inversión separada para cosas como los ahorros para la universidad, unas próximas vacaciones, una casa o un coche nuevos y otros objetivos financieros importantes le ayudará a ahorrar cada mes para alcanzar esos objetivos y le facilitará el seguimiento de los mismos. En lugar de intentar conciliar un presupuesto cada mes para ver si está cumpliendo sus objetivos financieros, puede simplemente comprobar el saldo de una cuenta. Si quieres asegurarte de que contribuyes de forma constante a cada uno de estos objetivos cada mes, también puedes establecer pagos mensuales automáticos, de forma que una cantidad fija de tu nómina se destine a ellos sin que tengas ni que pensar en ello.
3. Rellenar los sobres
Otra forma sencilla de controlar el gasto sin utilizar un presupuesto detallado es el método del sobre. Con el método del sobre, divides tus gastos discrecionales en categorías, como salir a cenar, ropa nueva, noches de cine, etc. Escribe cada una de estas categorías en un sobre individual, determina cuánto quieres gastar en cada una de ellas y, a continuación, rellena cada sobre con un sobre. Escriba cada una de estas categorías en un sobre individual, determine cuánto quiere gastar en cada una de ellas y, a continuación, llene cada sobre con la cantidad adecuada de dinero en efectivo el día de pago. Después, saca el dinero del sobre cada vez que quieras disfrutar de una de estas actividades. Cuando un sobre esté vacío, habrás alcanzado tu asignación presupuestaria mensual para esa actividad. Aunque el método de los sobres no permite ningún tipo de planificación a largo plazo, te ayuda a mantener bajo control tus gastos discrecionales, de modo que cada mes te quede dinero para ahorrar e invertir.
4. Obtener ayuda
Si se siente perdido a la hora de presupuestar su dinero, no intente hacerlo solo. En su lugar, busque un asesor financiero de confianza que pueda ayudarle a elaborar un plan que le resulte fácil de seguir. Un buen asesor financiero puede ayudarle a determinar sus objetivos financieros a corto y largo plazo y, a continuación, trabajar con usted para poner en marcha los sistemas que le permitan alcanzarlos. Un profesional de confianza puede aliviar gran parte del estrés y la ansiedad que conlleva intentar gestionar un presupuesto, y ayudarle a sacar el máximo partido al dinero que gana. Los buenos asesores financieros también pueden indicarle cuándo se dirige hacia una situación financiera peligrosa, o ayudarle a saber cuándo aprovechar las oportunidades fugaces. Por último, algunos asesores también pueden ayudarle con otras tareas financieras críticas, como la preparación de sus declaraciones de la renta estatales y federales.
5. Supervisar los progresos y dar vueltas de campana
Sea cual sea el sistema presupuestario alternativo que utilices para gestionar tus finanzas, vigila de cerca cómo vas cumpliendo tus objetivos. Cuando consiga un hito financiero, como saldar una deuda importante o reducir el gasto discrecional, celebre el logro. Uno de los mayores retos de la gestión financiera es el seguimiento, por lo que una pequeña celebración puede ayudarle a reforzar el comportamiento positivo y la disciplina que ha empleado para alcanzar sus objetivos. Regálate una noche de diversión o cómprate un artículo personal modesto que has estado reteniendo debido a su precio. Cumplir los objetivos y marcarlos con un poco de diversión puede ayudarle a mantenerse en el buen camino para alcanzar sus metas financieras a largo plazo.
Hacer un presupuesto sencillo y eficaz
Aunque odie hacer presupuestos, necesita utilizar algunos medios para gestionar su dinero y alcanzar sus objetivos financieros a corto y largo plazo. Estos sencillos consejos pueden ayudarle a limitar sus gastos discrecionales, a controlar dónde y cómo ahorra y gasta el dinero, y a invertir para el futuro sin ni siquiera tener que pensar en ello. También pueden ayudarle a aprender a reforzar los comportamientos positivos que necesitará para gestionar su dinero de forma eficaz durante el resto de su vida. Ten en cuenta los consejos aquí expuestos y empieza hoy mismo a tomar las riendas de tus finanzas.