Estás a punto de casarte. Enhorabuena. El matrimonio es uno de los mayores compromisos que se pueden contraer, y la emoción es tremenda. Sin embargo, un aspecto que las nuevas parejas tienden a evitar es el de sus finanzas, que pronto serán mutuas. Esto puede convertirse en una situación desafortunada, ya que el dinero es una de las principales razones por las que las parejas se pelean. De hecho, según datos de una encuesta reciente, el 24% de los estadounidenses afirma haber roto con su pareja por motivos económicos. Mientras se prepara para llevar su relación al nivel definitivo, he aquí algunas cuestiones financieras que debería tener en cuenta antes de pasar por el altar. Pueden ayudarle a determinar si está a punto de casarse con un vampiro financiero.
Mal crédito
Sin ser demasiado inquisitivo, puede ser difícil saber si su pareja tiene mal crédito. Tal vez le hayan denegado un préstamo para un coche o una solicitud de crédito para una tienda desde que empezó vuestra relación. Eso puede ser un buen indicio de problemas financieros. Independientemente de cómo lo determine, el mal crédito puede ser una señal de problemas matrimoniales inminentes. Si se casa con alguien que tiene problemas de crédito, podría ser difícil hacer compras importantes en el futuro, como comprar una casa o un coche nuevo. También podría ser un indicio de que su matrimonio estará plagado de problemas financieros que podrían provocar tensiones, discusiones y sacrificios.
No hay ahorro que valga
Si su pareja tiene pocos o ningún ahorro, es motivo de preocupación. Dependiendo de la edad de la persona, la falta de ahorros puede indicar que carece de presupuesto o que no se está preparando adecuadamente para los acontecimientos de su vida futura. La falta de ahorros también puede dejar a la persona (y a ti, cuando os caséis) desprevenida ante una emergencia, como una reparación importante de la casa u otro gasto inesperado. En cualquier caso, si se da cuenta de que su futuro cónyuge no tiene ahorros de los que hablar, deberían hablar de cómo piensan abordar la gestión del dinero como pareja.
Escasa capacidad de gestión de la deuda
Otra señal de que su relación puede estar atravesando dificultades financieras es que su pareja no gestione bien las deudas. La dependencia excesiva de las tarjetas de crédito, los saldos muy altos y la dificultad mensual para pagarlas son motivo de preocupación. Si su futuro cónyuge no tiene ni idea de cuántas deudas tiene, es posible que desee investigar y crear un plan por adelantado. Una pareja que está en sintonía financiera desde el principio tiene más posibilidades de permanecer unida.
También es importante recordar que usted puede ser responsable de las deudas de su pareja dependiendo del estado en que viva. En los estados de bienes gananciales (Arizona, California, Idaho, Luisiana, Nevada, Nuevo México, Texas, Washington y Wisconsin), tanto los ingresos como las deudas adquiridas en el matrimonio son compartidos por los cónyuges, aunque sólo uno de los dos tenga deudas. Por lo tanto, usted es responsable de ayudar a su pareja a pagar esa deuda. En los estados de derecho consuetudinario, en cambio, algunas deudas se comparten y otras no.
Las facturas se pagan tarde o no se pagan
Tal vez haya observado una actitud de laissez-faire en su pareja a la hora de pagar las facturas. Tal vez haya visto llegar por correo cartas de aviso final relacionadas con facturas vencidas. Si observa en su pareja una tendencia a dejar las cosas para más tarde, podría ser un indicador de graves problemas financieros. No pagar las facturas a tiempo puede tener un grave impacto negativo en su calificación crediticia. Además, los retrasos en los pagos conllevan sanciones, suspensiones o incluso cancelaciones de servicios importantes. Si nota que las facturas se acumulan, considérelo una gran señal de alarma y asegúrese de hacer un seguimiento.
Sin dinero a final de mes
Determine si su pareja vive al día y parece que se queda sin dinero a final de mes. Aunque todo el mundo se enfrenta a problemas económicos en distintos momentos de su vida, quedarse constantemente sin dinero antes del día de pago puede ser señal de graves problemas económicos. Vivir de cheque en cheque puede indicar que una persona no hace un presupuesto adecuado o que es irresponsable a la hora de gestionar sus finanzas. Una clara señal de alarma es si el mes empieza con gastos suntuosos pero acaba con un quejido y preguntándose cómo llegar a fin de mes. Por lo tanto, si nota que su pareja se queda en casa a final de mes y come una dieta constante de fideos ramen mientras espera el día de paga, debería ser motivo de preocupación.
Comunicación deficiente
Una de las señales más claras de que las cuestiones financieras podrían convertirse en un grave problema en su relación es que su pareja no pueda o no quiera hablar con usted de nada relacionado con el dinero. Al fin y al cabo, cuando se casen necesitarán algún tipo de plan para gestionar sus finanzas. Los dos tendréis que establecer un presupuesto doméstico, determinar cómo pagar las cosas y ahorrar para futuros acontecimientos de la vida. Si se encuentra con una mirada perdida u hostilidad cada vez que intenta hablar de asuntos económicos con su futuro cónyuge, podría significar que se avecinan problemas.
El amor es importante, pero no te olvides del dinero
El matrimonio es un compromiso importante, y el amor y la compatibilidad son componentes fundamentales de cualquier buena relación. Sin embargo, cuando te prepares para pasar el resto de tu vida con alguien, no olvides pensar también en el dinero. Si entablas una relación duradera con alguien que no gestiona bien el dinero, podrías acabar teniendo grandes problemas en el futuro. Si observas uno o varios de los signos de problemas financieros que se mencionan aquí, asegúrate de hablar con tu pareja sobre vuestras finanzas mutuas antes de casaros.