¿Sabías que pagar las deudas es una de las razones por las que algunas parejas deciden retrasar sus planes de casarse?
Un estudio publicado en Brides.com revela que los préstamos estudiantiles son los culpables de que las parejas retrasen su matrimonio. El estudio realizado por la American Student Assistance reveló que el 21% de los encuestados admitió haber pospuesto sus planes de boda debido a una situación de deuda por préstamos estudiantiles.
Al parecer, muchos millennials han optado por retrasar muchos hitos porque están sobrecargados de deudas. Aunque casarse a una edad más tardía puede no parecer tan malo, puede retrasar otros hitos de tu vida como la paternidad. Puede parecer un sacrificio noble para vivir una vida matrimonial sin deudas, pero la verdad es que no es realmente necesario. Puedes planear tu boda aunque estés pagando deudas.
Según los datos de CostOfWedding.comel coste medio de una boda en EE.UU. es de 26.645 $. Sin embargo, también hay muchas parejas que gastan menos de 10.000 dólares en su boda. Hay varias posibilidades de reducir los gastos de la boda para que no comprometa tus objetivos de saldar deudas.
Cómo puede comprometer tu boda el pago de deudas
Aunque casarse es ante todo una decisión emocional, hay que tener en cuenta las finanzas antes de contraer matrimonio. Las deudas pueden influir de dos formas en tu decisión de casarte.
- Hace que la boda sea inasequible. La ceremonia y el banquete te costarán dinero. Aunque no es tan caro como comprar una casa, el coste sigue siendo lo bastante significativo para que tu situación de endeudamiento haga que pagar una boda parezca imposible.
- Reticencia a introducir las deudas en el matrimonio. Algunas parejas se avergüenzan de sus deudas personales. Preferirían saldarlas antes que introducir sus deudas personales en el matrimonio.
Aunque su decisión de pagar las deudas antes de casarte es admirable, no es una necesidad. Lo creas o no, puedes permitirte pagar tu boda aunque aún tengas deudas que saldar. Sólo tienes que hacer un poco de planificación y un montón de proyectos de bricolaje de por medio.
Algunas personas endeudadas pueden sentirse inclinadas a pedir dinero prestado para pagar su boda. De hecho, según MarketWatch.comel 36% de las parejas utilizaron sus tarjetas de crédito para pagar los gastos de su boda. Y no sólo eso, el 32% de las parejas afirma que tener acceso al crédito les dará más margen en su presupuesto.
La verdad es que está bien tener un gran presupuesto cuando te casas, sin embargo, no es necesario gastar mucho para tener la boda de tus sueños. Es posible que usted tenga una boda frugal que sigue siendo elegante y bien pensado.
Cómo hacer que su boda sea asequible a pesar de la existencia de deudas
Gastar mucho dinero no es obligatorio para casarse. Aquí tienes algunos consejos que te ayudarán a financiar la boda de tus sueños sin agravar tus deudas.
- Fija un presupuesto para la boda. Un presupuesto es siempre la mejor manera de empezar. Es bueno acostumbrarse a discutir las finanzas antes de tomar una decisión. Vuestro matrimonio será más armonioso con un plan presupuestario, así que empezad por utilizar uno mientras planeáis la boda. Sea cual sea la cantidad que decidáis, debéis ceñiros estrictamente a ella.
- Que sea algo pequeño e íntimo. No tiene por qué invitar a nadie por mera cortesía. Sólo puedes invitar a aquellos con los que realmente quieres estar en tu día especial. Además, tener una lista de invitados larga te hará gastar más.
- Pide ayuda a familiares y amigos. Si tienes familiares y amigos hábiles, puedes pedirles sus servicios como regalo de bodas. Un amigo que tenga una buena cámara y sepa hacer buenas fotos puede ser el fotógrafo de tu boda. Una hermana que sepa hacer pasteles puede encargarse de la tarta. También puedes pedirle a tu madre que te ayude a preparar la comida de la fiesta. Un pariente que tenga un jardín espacioso puede ser el lugar del banquete.
- Hazlo tú mismo. ¿Por qué gastar en invitaciones, recuerdos, decoraciones y otros efectos de boda si puedes hacerlo tú mismo? Si falta mucho para la fecha de la boda, puedes investigar y crear tus propios materiales de boda. Será muy divertido y puede resultar muy rentable.
En lugar de fijarte en la cantidad que vas a gastar, ¿por qué no te centras en hacer que tu boda no tenga precio? Esto te ayudará a mantener el coste bajo para que puedas seguir pagando deudas mientras planeas tu boda.
7 ideas para que tu boda no comprometa el pago de tus deudas
Para planificar una boda rentable, aquí tienes 7 ideas que pueden ayudarte a planificar una boda rentable.
- Cásese en temporada baja. La mayoría de las bodas se celebran de abril a agosto. Los precios subirán entonces. Elige una fecha que no coincida con esos meses.
- Elige una boda de día. La mayoría de las bodas de tarde son más caras porque son más formales. Una boda más informal te ayudará a recortar algunos gastos de la boda (por ejemplo, servir cócteles en lugar de una cena completa).
- Elige un lugar no tradicional. Como ya hemos dicho, si conoces a alguien que tenga un bonito jardín o una granja, puede ser un lugar estupendo para casarse, además de económico.
- Utiliza lo que tienes. Por ejemplo, si tienes un equipo estéreo, puedes utilizarlo en lugar de pagar el alquiler de un equipo de sonido. Lo mismo ocurre con la decoración de la boda.
- Prescinde de los regalos para los padrinos y las damas de honor. Son tus parientes y amigos más cercanos. Lo entenderán.
- Ofrezca publicidad a los proveedores a cambio de descuentos. Si no te importa mostrar tarjetas de proveedores, esto debería ayudarte a ahorrar dinero.
- Recurre a la universidad local. A veces, los estudiantes necesitan un dinero extra. Busca estudiantes que deseen tener una experiencia práctica tocando instrumentos, en restauración o en fotografía. Puedes conseguir estos servicios por un precio más bajo.
Planear su boda puede ser una gran manera de practicar la armonía financiera en pareja. Esto puede serle útil para seguir pagando sus deudas después de casarse. Su situación crediticia no tiene por qué retrasar sus planes de casarse. Sólo tienes que aprender a priorizar los gastos importantes y elegir la opción más rentable para el resto.